Adiós a Nihil Obstat | Hola a The Catalán Analyst





Después de 13 años de escribir en este blog prácticamente sin interrupción, hoy lo doy por clausurado. Esto no quiere decir que me haya jubilado de la red, sino que he pasado el relevo a otro blog que sigue la misma línea de Nihil Obstat. Se trata del blog The Catalán Analyst y de la cuenta de Twitter del mismo nombre: @CatalanAnalyst . Os los recomiendo.



Muchas gracias a todos por haberme seguido con tanta fidelidad durante todos estos años.


jueves, 10 de noviembre de 2011

Los medios de izquierda de EEUU linchan a los negros cuando huyen de la plantación demócrata

Lloyd Marcus:
"La abogada feminista Gloria Allred ha dado una rueda de prensa donde su cliente Sharon Bialek planteaba graves acusaciones gráficas de acoso sexual contra Herman Cain. Los políticamente correctos exigen que pruebe que no es culpable, pero el peso de la prueba debe recaer siempre sobre el que acusa, que debe demostrar lo que dice. La izquierda dice que los hechos no importan, sólo importa la gravedad de las acusaciones. Cualquiera que se atreva a cuestionar a la acusadora es atacado de estar a favor del acoso sexual y de odiar a las mujeres. La arrogancia e hipocresía me dejan boquiabierto. Todas las mujeres que acusaron a Bill Clinton de acoso sexual fueron etiquetadas de mentirosas y zorras. Paula Jones demandó a Bill Clinton por acoso sexual. El consejero de Clinton James Carville dijo: "Rastrea billetes de $ 100 por campings y no sabes lo que encontrarás". Gloria Allred nunca salió en defensa de Paula Jones o ninguna de las numerosas acusadoras de Clinton. Clinton fue protegido porque era de izquierdas. En 1991 los demócratas promovieron las acusaciones de acoso sexual contra el conservador negro Clarence Thomas, en un esfuerzo coordinado para impedir que Thomas obtuviera la nominación al Tribunal Supremo americano. Fracasaron, pero la batalla fue brutal. Los medios hurgaron a fondo la vida de Thomas, incluso las películas que alquilaba. Buscaban como locos encontrar algo que pudiera destruir la reputación de Thomas. La gráfica descripción de Anita Hill de un pelo púbico en un refresco quedará grabado para siempre en los anales de la infamia. El ataque entusiasta de los medios intentando destruir a Cain es un "déjà vu" de vuelta a empezar. El momento en que ha aparecido este escándalo es muy sospechoso. Justo cuando Cain deja petrificadas a las fuerzas vivas al situar-se como líder, estas mujeres deciden darse a conocer con vagas alegaciones de años remotos. Y luego, justo cuando hace falta, sale Sharon Bialek alegando que Cain no es sólo un acosador sexual pasivo, sino un abusador. Evidentemente la exagerada acusación de Bialek estaba diseñada para ser la estocada de gracia a la campaña de Cain. "
(Via)